De Abu Huraira, Al-lah esté complacido con él, que dijo el Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz: “El mejor día sobre el que ha salido el sol, el día del viernes (Yumua). En él fue creado Adam, en él entró en el Jardín y en él fue sacado de él”.
De Abdullah Ibn Umar, Al-lah esté complacido con ambos, “que el Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, dijo: ‘quién de ustedes vaya a la oración del viernes que se lave todo el cuerpo antes’”.
Narró Amer Ibn Sulaim Al Ansari: Abu Said informó que el mensajero de Alah -la paz y las bendiciones sean con él- dijo: "el gusul (la ablución mayor) el dia viernes es obligatorio para todo púber, debe limpiar sus dientes con el siwak y si tiene que use perfume".
De Samra, que Al-lah esté complacido con él, que el Mensajero de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, dijo: “Quien realiza la ablución menor el día viernes le es suficiente, y esto es bueno para él porque aplicó la sunnah, y realizar la ablución mayor es mejor”.
De Abu Huraira, Al-lah esté complacido con él, que dijo el Profeta, Al-lah le bendiga y le dé paz: “A quien hace el wudú completamente, es decir, en toda regla; después va a la oración del viernes para escuchar y prestar toda su atención, le son perdonadas sus faltas desde ese día hasta el viernes siguiente. Y tres días más. Y quien se entretuvo jugueteando perdió, pues, su recompensa. ”.
De Abu Huraira, Al-lah esté complacido con él, que el Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, dijo: “Aquel que se bañe igual que si hubiera mantenido relaciones conyugales antes de ir al rezo del viernes y vaya a la mezquita a primera hora es como quien ha sacrificado un camello para la causa de Al-lah y hubiera donado su carne; quien vaya a segunda hora es como si hubiera sacrificado y donado una vaca; quien vaya a tercera hora, es como si hubiera sacrificado y donado un carnero adulto; quien vaya a cuarta hora, es como si hubiera sacrificado y donado una gallina; y quien vaya a quinta hora, es como si hubiera donado un huevo. Pues, cuando salga el imam, se presentarán los ángeles para escuchar el recuerdo y la mención de Al-lah”.
De Salamta Ibn Al-Ku’, Al-lah esté complacido con él, que era uno de los miembros del suceso de la sombra del árbol, que dijo: “Solíamos rezar la oración del viernes en compañía del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, y luego nos íbamos cuando que las paredes dejaban de tener sombra en que nos podamos refugiar”. En otra versión, que: “Solíamos rezar la oración del viernes en compañía del Mensajero de Al-lah, Él le bendiga y le dé paz, después de que el sol haya superado el cénit del mediodía. Después volvíamos y seguíamos la sombra”.